30.12.11

Entre Panamá y Trinidad y Tobago

Lo literal de andar en las nubes puede llegar a ser bonito, si se toma en cuenta el fondo musical, el olor a mi misma, el calor sudaca, caribeño, el anhelo a la aventura.

Este es mi tercer avión del día: Panamá-Puerto España... me falta uno más antes de llegar a mi destino temporal: St. Vincent and the Granadines.

El verde conquistado de esta Latinoamérica mezclada me ilumina, me parece que es él quien muy adentro nos habita. En Panamá pude notar, más que nunca, que raza más interesante somos, desde México hacía abajo... uno que otro blanco, la mayoría color tierra, con españoles ya olvidados y negros con su inglés criollo que más que la lengua del mundo suena al lamento esclavizado.

Y aquí vamos, sobre el mar caribe a sentir el clima de la isla, de una de tantas, donde alguna natura nos dará palabras... entre Panamá y Trinidad y Tobago.

4.12.11

sobre la simpleza, la humildad y el equilibrio

Entonces es la complicación,
o lo que uno piensa que es complicado.

La vida por si misma no creo que sea complicada,
por si misma es simple, humilde, equilibrada.
Pero la vida nos necesita, y nosotros a ella.
Los otros seres vivos la respetan, eso me queda claro.
La respetan y la alaban con su existencia simple, humilde, equilibrada.
Nosotros, y me atrevo a generalizar a sabiendas de que puedo equivocarme,
la tomamos, la estrujamos, la enredamos, la pizoteamos,
la complicamos de un modo tan esquisito que, la embellecemos y la arruinamos.

Estoy empezando a pensar, de hecho, que no hay vuelta atrás,
que incluso el nombrarla como tal, la agrede en lo más profundo,
de manera irremediable.

Pero... acaso ¿podemos evitarlo?
Quizá nuestra propia existencia esté basada en destruir, violar y corromper
la simpleza, la humildad, el equilibrio.

¿Por qué habría de ser distinto?
¿Por qué habría que tomarse la molestia en ver de otro modo lo que nos deslumbra?